😊 ¿Qué disfrutaremos?

Corría la Semana Santa de 1886, más concretamente el Domingo de Ramos, cuando por primera vez en Madrid se celebraba la festividad religiosa más importante del año, después de la Navidad, siendo la ciudad cabeza de una diócesis metropolitana. El recién nombrado nuevo Obispo, don Narciso Martínez Izquierdo, había acudido en carruaje desde su cercana vivienda en el Palacio Arzobispal, en la calle de San Justo, hasta la Colegiata (que todavía no era catedral, aunque hacia sus funciones) de San Isidro. Al llegar al templo para oficiar la festividad de las Palmas, en el atrio del edificio, un sacerdote se le aproximó y le disparó en tres ocasiones hiriéndolo de muerte.

El asesinato del primer obispo de Madrid se convirtió en un acontecimiento dramático en el Madrid de finales del siglo XIX. Al parecer el comportamiento del clero en la recién creada diócesis dejaba mucho que desear. Al ser una demarcación excesivamente grande y difícil de controlar, miembros del clero procedentes de otras demarcaciones aprovechaban la circunstancia para holgar a sus anchas sin ser supervisados por sus superiores jerárquicos. La traída desde el obispado de Salamanca de Martínez Izquierdo, que tenía fama de ser un canónigo competente y bien formado (había sido diputado y senador en las Cortes de la Restauración dentro del grupo carlista), implicó un proceso de reforma del clero que molestó a muchos curas de parroquia. Entre ellos se encontraba Cayetano Galeote Cotilla, natural de Vélez – Málaga. Este cura atribulado, conflictivo, irascible, patibulario y montaraz terminaría considerando a Martínez Izquierdo el responsable de sus males y por ello, decidió asesinarlo.

📌 Punto de encuentro

Plaza de la Armería, frente a la escultura de San Pablo

👉 Detalles

En nuestra ruta dedicada a crímenes hablaremos de las circunstancias que llevaron a este asesinato tan nombrado. Pero también trataremos de explicar, esta vez, más desde la psicopatología que desde la teoría criminológica, las circunstancias que llevaron al autor del crimen a cometer tan execrable acto. Y lo haremos en los lugares donde se desarrollaron los hechos, entre el Palacio Arzobispal y la Colegiata. De paso, aprovecharemos para explicar algunos aspectos fundamentales de cómo funciona la administración de la justicia en el ámbito de la Iglesia.