Txell
Cuando Montaner elaboró el proyecto de construcción de Sant Pau, en Europa imperaban los principios higienistas. Esto se hizó patente tanto en el cálculo de metros cuadrados que tenía que tener cada paciente, como en la importancia de la luz natural, la presencia de los jardines o los materiales empleados para mantener la mejor profilaxis: Arquitectura que cura, arquitectura que enamora. Sant Pau es hoy en día el recinto modernista más grande del mundo.
Este fue pensado para que los enfermos conjurasen su malestar en un entorno sensorial, emocional, ideal para reconfortarlo en cuerpo y alma. Se trata de una ruta tan sensorial y emocional como la arquitectura que proyectaba Doménech y Montaner
Entre 6 y 10 personas
Las entradas al recinto y radio-guías Whispers.